Clemente Rodríguez, alma de las carreras en Asturias

Cogió la Federación con 4 competiciones y 92 pilotos y la dejó con casi medio centenar y cerca de mil licencias

Oviedo, José B. Pino
El funeral por Clemente Rodríguez, ex presidente de la Federación Asturiana de Automovilismo, que falleció el pasado domingo por la noche, se celebra hoy, a las 5 de la tarde, en la iglesia de San Melchor de Quirós, del barrio de Vallobín. Sin duda en la despedida le acompañarán todos los que de una u otra manera están ligados al deporte de las cuatro ruedas.

Será un reconocimiento sentido y masivo hacia una persona que fue el gran impulsor del automovilismo regional, deporte que durante sus mandatos alcanzó gran auge a nivel nacional y europeo.

Clemente modernizó las competiciones automovilísticas en todos sus aspectos, desde el cronometraje a la seguridad, pasando por las verificaciones y los reglamentos. Creativo, ingenioso y resolutivo, el presidente Clemente no se amilanaba ante nada y conocía como pocos todos los aspectos de la competición.

En 1977 se hizo cargo de la Federación Asturiana de Automovilismo, un deporte que en aquella época practicaban ricos y señoritos, y lo popularizó. Existían en la región 4 rallies y 92 licencias. Los rallies y las subidas se fueron multiplicando, así como las licencias de pilotos y copilotos. De la mano de Clemente salieron las competiciones de autocross y los rallies de regularidad, e impulsó también el karting.

En 1986, tras haber sido vicepresidente de la Federación Española de Automovilismo, dejó la Federación regional, con casi medio centenar de competiciones y cerca de mil licencias, para ocuparse de la autoescuela que llevaba su nombre y a la que había robado muchas horas para dedicárselas a su deporte favorito.

En noviembre de 2002 recibió un caluroso homenaje y pocos días antes declaraba en una entrevista realizada por LA NUEVA ESPAÑA: «Dediqué mucho tiempo al deporte y poco a la familia».

En aquella entrevista reconocía que sus peores momentos fueron cuando tuvo que elegir entre rally de la Manzana y Príncipe, con triunfo del segundo, y su dimisión como vicepresidente al descender Carlos Gracia al rally de Avilés.

Maestro de las actuales generaciones de organizadores, directores de carrera y comisarios, reconoció también que «algunos organizadores me defraudaron».

Poco antes de Navidad su salud le obligó a cancelar una comida con sus amigos de la Escudería Avilesina, que preside José I. López, a la que también acudían Jesús L. García y varios periodistas.

Directivos y ejecutivos de las empresas del grupo García Rodríguez Hermanos visitaron, invitados por Fiat, las instalaciones de la emblemática marca Ferrari, donde se les explicó el proceso de fabricación artesanal de los míticos deportivos. También tuvieron tiempo para acudir a Ducati, marca motociclista que da nombre a una versión del Alfa 147. En la fotografía, entre otros, Manuel G. Arenas, consejero delegado de GRH, y Eulogio Carbajal, de Fiat Auto España.

La Nueva España