Sergio afrontaba el rallye de Canarias sin siquiera haber tenido tiempo de probar su nuevo coche, que recogía de las instalaciones de RCA, preparador oficial de Nissan España y en cuya sede había estado el vehículo desde su única utilización en competición a finales del pasado año en el rallye Costa Brava. Para su sorpresa, el piloto gijonés comprobaba antes de su primer contacto con el coche, en el shakedown, que las especificaciones del 350Z EVO que acababa de adquirir distaban enormemente de las acordadas con Nissan España y que figuraban en el listado de características técnicas del vehículo oficial en el que se baso el acuerdo de compra del mismo.
Así, por ejemplo, el coche no contaba con los frenos de mayor diámetro y en su lugar montaba los de la Challenge, equipados incluso con las pastillas de freno probadas a principio del año pasado y que posteriormente se desecharon para los coches de la copa. Además, los amortiguadores delanteros no tenían carga y el grupo daba toda la sensación de no ser el grupo corto que equipaba el coche oficial. Faltaban también con respecto al coche oficial visto en el Costa Brava, las canalizaciones de aire de la admisión y el terratip Coralba de especificaciones superiores al usado en la copa, mientras que el motor cortaba sólo a 6800 vueltas cuando ya el de la Challenge se podía estirar hasta las 7300, y estaban ausentes tanto el control de tracción como la adquisición de datos .
Con todas estas deficiencias y sólo los pocos kilómetros realizados en el tramo de pruebas, Fombona afrontaba la primera etapa con la única intención de rodar y tratar de terminar el rallye, consciente de que dadas las enormes lagunas de preparación que presentaba el vehículo iba a ser absolutamente imposible estar cerca no sólo de los más evolucionados Porsche GT o los potenciados Grupo N plus sino, siquiera, plantar cara a los grupo N 'normales'. Así, con un coche que rendía menos que los de la Nissan challenge del año pasado, Sergio, al que copilotaba en Canarias el local Rogelio Peñate, se clasificaba de forma habitual entre los diez primeros, entablando un bonito duelo con el Porsche del alemán Mathias Kahle, al que mantenía por detrás durante toda la jornada mientras se situaba a espaldas del trío de grupos N que ocupaban los puesto del sexto al octavo de la general.
Pero en el último tramo del día, Cruz de Tejeda-Fontanales, que a la postre sería neutralizado por el accidente del Porsche de Aviñó, el motor del 350Z se rompía nada más iniciar la especial, dejándo a Fombona-Peñate fuera de carrera antes siquiera de llegar a mitad de rallye.
Ahora para Sergio llega el momento de pedir responsabilidades a Nissan España con el fin buscar una solución a una situación que es totalmente insostenible para el piloto gijonés. Una solución que pasa bien por la reposición por parte de Nissan de todas las piezas que faltaban en el coche utilizado en Canarias, así como que la marca se haga cargo de los costes derivados del montaje y puesta a punto subsiguiente o, en vista de que existe un claro incumplimiento de contrato por parte del vendedor del vehículo, que se proceda a la devolución del importe satisfecho para la compra del mismo. En ambos casos, además, la reclamación se extenderá también a solicitar la correspondiente indemnización por los daños y perjuicios sufridos, cubriendo también los gastos que ha supuesto la participación en el rallye de Canarias.
