Nicolas, te vas de Oviedo com líder del IRC y con un segundo puesto. ¿Cómo te sientes?
Evidentemente, me gustaría haber ganado, pero creo que la sensación general es muy buena. Después de estar corriendo al máximo la primera jornada, fue bastante emocionante ver que llegamos empatados al final. El segundo día me lo tomé con mucha más calma, pensando mucho más en el campeonato que en la posible victoria. Quedan ahora tres rallys por delante, y lo que tengo que intentar es sumar el máximo de puntos para lograr el título.
Fue extraño ver tan atrás a los pilotos españoles, ¿por qué crees que fue así?
Yo no esperaba que pasara esol. Al ver a pilotos como Ojeda o Solá pensé que podrían estar arriba, peleando con nosotros, así que no me explico qué pudo pasar. Creo que no hay una explicación, aunque me imagino que es una cuestión de ritmo. En un campeonato como el IRC o el ERC siempre hay mucho más ritmo que en un nacional francés o español, por ejemplo. Esa
puede ser la causa, aunque tengo que decir que me consta que Ojeda o Solá son pilotos muy rápidos. El año pasado Quique fue mi rival y compañero y, aunque es posible que yo este año vaya un poco más rápido, no creo que haya tanta diferencia. Es complicado entender qué pudo pasar, no lo entiendo.Conocías los rallys en España porque has estado en Cataluña, pero, ¿qué te pareció Asturias?
Son terrenos completamente diferentes. Las carreteras de Asturias son mucho más técnicas y no tan rápidas como las de Cataluña. Al principio me costó mucho adaptarme, porque de hecho hay que tener en cuenta que el piso estaba muy húmedo, y eso no nos puso las cosas fáciles. Pero creo que tomé la determinación de arriesgar para poder estar un poco más arriba, aunque confieso que fui con muchísimo cuidado. A pesar de la lluvia, no fuimos del todo mal, así que estoy bastante satisfecho por ello. Tuve buen feeling, y eso siempre es bueno para poder correr rallys tan complicados como éste. El aspecto organizativo, además, me pareció que estuvo a gran altura.
Tuviste como compañero de equipo a Sergio Vallejo, con el 207 S2000 de BFGoodrich, ¿qué te pareció?
Tanto él como Quique fueron muy amables conmigo, porque me dijeron muchos trucos entrenando. Incluso me dijeron dónde se salía habitualmente algún coche... (risas). Sergio me pareció muy buena persona y un piloto muy rápido. Está acostumbrado a un coche como el Porsche, completamente diferente a este S2000. Para ir rápido en el IRC hay que ir muy al límite, y éste está muy alto. Si me dieran a mí un Porsche para una carrera no creo que lo hiciera mejor que Sergio con el S2000...
¿Ves al S2000 com el coche del futuro, particularmente en el Mundial De Rallys?
Sí. Lo que tengo entendido es que tienen pensado añadirle un turbo, por lo que ello traerá como consecuencia un par mayor. Evidentemente un S2000 no es un WRC, pero creo que el S2000 está bien de potencia y tiene un sonido muy bonito, algo que considero muy importante. Me daría pena que con el turbo se le quitar parte de ese sonido tan agradable. Es bueno que haya coches que, aún teniendo tecnología, ésta esté un poco limitada.
Nicolas, como ciclista en nuestro país siempre te quedó la espina clavada...
Bueno. Recuerdo que en el Campeonato Del Mundo de Sierra Nevada, en el año 2000, no pude conseguir el título que llevaba seis años consecutivos ganando... Son cosas de las carreras. También sé que ha habido pruebas en Vigo, relativamente cerca de Oviedo... España es un país con mucho potencial en ciclismo y también en mountain bike.
¿Qué te parece más peligroso, los rallys o el descenso? Porque está claro que ambas disciplinas tienen bastante riesgo...
Sí, es cierto. En la bicicleta quizá chocas más a menudo, te sueles caer... pero no suele ir más allá de un golpe fuerte o una rotura sin consecuencias, porque realmente vamos muy protegidos. En el coche es menos común salirse, pero cuando lo haces puedes tener problemas, porque el golpe es muy fuerte. Son cosas diferentes, aunque lógicamente tengo claro que se corre riesgo en ambas.
En cuanto a las sensaciones, ¿con qué te quedas?
En ambos casos se trata de deportes muy excitantes, pero los rallys tienen la particularidad de que no tienes un coche de rallys en tu casa para practicar cuando quieras. Con la bicicleta puedes salir siempre que quieras a entrenar, o simplemente a divertirte, mientras que el coche de rallys sólo lo pruebas cuando hay unos tests o un rally. Quizá por eso tenga la sensación de que es mucho más excitante correr rallys del IRC que pruebas de descenso del Campeonato Del Mundo. No sabría con cuál quedarme... ¡Me encantan las dos cosas!
Elías Domingo
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